Todo sobre la relación Deuda – Ingreso
Este artículo está dedicado a “la relación Deuda – Ingreso”, un concepto que por su importancia debes también conocer, para reparar tu crédito en caso necesario. Con gusto Crédito 768, te regala esta información básica.
Para cualquier persona que intente reparar su crédito, es imprescindible poseer al menos un conocimiento básico sobre la relación deuda-ingreso, lo que le permitirá verificar cómo esta se manifiesta en su crédito, con el fin de mantener o corregir la forma en que lo está usando.
La relación deuda-ingreso, no es otra cosa que el porcentaje del ingreso bruto mensual que un individuo destina al pago de sus deudas.
Esta deuda se manifiesta en dos formas principales:
- Su relación frontal: Muestra el porcentaje del ingreso que se destina a sufragar los costos de la vivienda, de una hipoteca, de una renta, u otros. Por ejemplo, en una hipoteca el cálculo de la relación deuda-ingreso incluye: el costo principal de la hipoteca, los intereses, el seguro hipotecario, el seguro contra riesgos en la casa hipotecada, los impuestos a la propiedad e incluso las cuotas de asociación de propietarios.
- La relación inversa: Se refiere a los pagos de la deuda que van a pagos recurrentes, incluidos los que se encuentran en la relación frontal, más deudas de tarjetas de crédito, préstamos para automóviles pagos, pagos de préstamos estudiantiles, pagos de manutención de niños, pagos de pensión alimenticia y juicios legales.
¿Por qué es importante la relación deuda-ingreso?
La importancia de la relación deuda-ingreso, radica en que muchos prestamistas para hacer un préstamo ponen mucha atención a la capacidad que la persona que lo solicita posee para pagar su deuda, en función de la cantidad de deudas que están pagando al momento de la solicitud, lo que se refleja en la relación deuda – ingreso.
Por ejemplo, muchas compañías hipotecarias preferirían hacer el préstamo a un individuo que tenga una relación deuda-ingreso de aproximadamente 28/36. Esto significa que: Si el individuo tiene un ingreso bruto anual de $ 45,000, y eso es dividido entre 12, significa que su ingreso mensual es de $ 3,750. Si por ejemplo tomamos 28, veremos que para el individuo la relación frontal para gastos de vivienda será $ 1,050, que es lo que puede pagar solo por gastos de vivienda. Para la relación de retorno, llegará a $ 1,350 por gastos de vivienda y deuda recurrente.
Esto muestra a la compañía hipotecaria que el individuo solo tiene $ 1,350 por sus gastos de vivienda y una deuda recurrente disponible dada la hipoteca. Esto no está mal, pero convendría que tu relación deuda-ingreso para fuera aún más pequeña.
La razón de esto consiste en que cuanto menos tenga que pagar cada mes por sus deudas, más dinero tendrá que pagar por un préstamo. Esto significa que mejor será la capacidad que tiene la persona para pagar préstamos sin necesidad de permitirle entrar en incumplimientos.
¿Cómo bajar la relación deuda-ingreso?
Para reducir tu relación deuda-ingreso lo más importante es que seas verdaderamente responsable en el manejo de tu deuda. En esto radica la clave de lo que debes conocer.
Por supuesto, si tienes una relación deuda-ingreso alta, nadie va a querer hacerte un préstamo, por la sencilla razón que no eres confiable y seguro para que se te preste dinero. Te argumentarán que ya pagas mucho dinero de tus ingresos por concepto de tus deudas y que no debías incurrir en más deudas.
Otra manera excelente de disminuir tu relación deuda-ingreso, es aumentar tus ingresos, pero está claro que esta opción no es tan fácil de lograr. También pudieras reducir los pagos con tus tarjetas de crédito, pero para eso necesitarías disponer de alguna liquidez de dinero en efectivo.
Además, al momento de solicitar el préstamo debes tratar de pagar todas las deudas que tengas. Con este esfuerzo también ayudarías a reducir tu relación deuda-ingresos.
¿Cuál sería la mejor relación deuda-ingreso?
La mejor relación deuda-ingreso que pudieras tener sería por debajo del 20%. Ello significaría que tienes mucho dinero disponible para pagar tus deudas, y tus prestamistas estarán más ansiosos por prestarte dinero. Pero está claro que mantener una relación deuda-ingreso tan baja es bien difícil, sobre todo en la situación económica del panorama en el que hoy vivimos.
Por lo tanto, te recomendamos que al menos intentes mantenerte en una relación deuda-ingreso que esté por debajo del 36%. Así la mayoría de los prestamistas hipotecarios y otros prestamistas te seguirán prestando dinero por ser confiable y seguro para pagar los préstamos.
¿Cuál sería la peor proporción?
La peor relación deuda-ingreso que pudieras tener, sería una que está por encima del 46%. Ello denotará que estás pagando casi la mitad, o más, de tus ingresos a tus deudas, y que por lo tanto no estás en condiciones de pagar nuevas deudas. Los prestamistas pensarán que no hay garantía de que cumplas con los pagos en tiempo y forma, así no se arriesgarían a hacerte algún préstamo.
Por último, te informamos que también para este caso del manejo de la relación deuda-ingreso en tus cuentas, puedes solicitar la asesoría y la ayuda profesional de Crédito 786.